
Esta edificación con su imponente estructura y llamativos detalles, la hacen uno de los referentes arquitectónicos más importantes de la República Dominicana.
La basílica fue construida para reemplazar un antiguo santuario, en donde apareció 𝘓𝘢 𝘈𝘭𝘵𝘢𝘨𝘳𝘢𝘤𝘪𝘢, el cual data de 1572. La basílica se comenzó a construir en 1954, por órdenes del primer obispo de Higüey, monseñor Juan Félix Pepén, la cual duró 17 años para su construcción.
Veamos algunas de sus características constructivas:
Estilo arquitectónico: racionalismo y arquitectura brutalista.
Años de construcción: 1954-1971
Arquitectos: André Dunoyer de Segonzac y Pierre Dupré (franceses).
Nave principal: altura de su arco de 80 m.
Campanarios: 1.
Campanas: 45.
Área de construcción: 4,680 metros cuadrados.
Forma del diseño: Cruz latina.

Los vitrales: Son un sello característico de este espacio, al igual que los murales. Los vitrales fueron diseñados en conjunto con el edificio que las alberga, no una vez hecho el edificio. Las vidrieras, elaborados de 1947 a 1960, son parte de un concepto adoptado por los arquitectos desde el proyecto que presentaron en el concurso y precisado más tarde en función de la necesidad de resistencia al riesgo de huracanes.
Los murales: La idea se concretizó en la puesta en marcha del proyecto después de abril de 1952, fundamentalmente por la presencia en el equipo del proyecto de Andrés Réau, pintor encargado de las maquetas. Se encargó de dibujar los bocetos, buscar las colaboraciones según las orientaciones, para distribuir los registros de las figuras que ilustran los temas clave del Nuevo Testamento.
Vela Zanetti, quien fue nombrado directamente por el Estado en el 1961 como encargado, pintó los murales que representan parte de la leyenda de la Altagracia y por otra parte, diversas advocaciones de la Santa Virgen.
Los mosaicos de la letanía de la Virgen María: Son otra de las características más llamativas de la Basílica. El material utilizado es la pasta de vidrio teñido permitiendo las tonalidades y la conservación en el compás de los matices. Las letras de oro sobre fondo escarlata, en el exterior de la pared. Notas de color gris azulado oscuro en el interior de la pared. Las letras se formaron según un alfabeto uncial dibujado por Pierre Dupré, interpretado por artesanos venecianos, tallados y ensambladas las piezas con el diseño general de los arquitectos.

Es muy conocida por su arco principal, que se eleva a 80 metros. El interior está constituido por una
nave principal cubierto por un conjunto de bóvedas que penetran para reforzarse y escalonarse.
Entrada: la puerta principal está hecha de bronce con un baño de oro de 24 kilates, además tiene un campanario de 45 campanas hechas de bronce cada una.
El arquitecto Alex Martínez subraya que la Basílica “es una de las primeras manifestaciones de una arquitectura neo-expresionista en el país”.
UN POCO DE HISTORIA SOBRE SUS 17 AÑOS DE CONSTRUCCIÓN

Los arquitectos franceses fueron elegidos a través de un concurso internacional anunciado en el 1947, que sin embargo se efectuó en el 1949. Estos profesionales
del diseño se encontraron con monseñor Eliseo Pérez Sánchez, quien era un entusiasta promotor del proyecto.
Monseñor Pérez Sánchez puso una simbólica primera piedra el 21 de enero de 1952 en presencia de monseñor Béras, coadjutor del arzobispado de Santo Domingo monseñor Pittini, quien dio la primera palada de tierra en octubre de 1954”, indican escritos de Dunoyer de Segonzac sobre la historia de la Basílica.
Después de la terminación de los trabajos de hormigón armado en marzo de 1960 y una pausa de cinco años; las obras se reanudaron bajo la dirección de monseñor Clarizio, entonces Nuncio Apostólico. La realización del Altar Mayor permitió celebrar los primeros oficios. Las vidrieras, los vitrales y los murales se hicieron posteriormente.
El 12 de octubre de 1971 el gobierno dominicano declaró la Basílica Monumento Nacional y el 17 de octubre el Papa Pablo IV la declaró Basílica Menor.
El presidente Joaquín Balaguer fue quien entregó la obra a monseñor Juan Félix Pepén, obispo de Higüey. Al acto asistieron el cardenal Humberto Quintero de Venezuela, el cardenal Miranda de México, así como dieciséis obispos y arzobispos.
Otros datos relevantes:
𝘜𝘣𝘪𝘤𝘢𝘤𝘪𝘰́𝘯: Provincia de la Altagracia, Municipio Higüey.
𝘊𝘶𝘭𝘵𝘰 𝘤𝘦𝘭𝘦𝘣𝘳𝘢𝘥𝘰: Catolicismo.
𝘈𝘥𝘷𝘰𝘤𝘢𝘤𝘪𝘰́𝘯: Nuestra Señora de la Altagracia.
𝘋𝘦𝘥𝘪𝘤𝘢𝘤𝘪𝘰́𝘯: 21 de enero (fecha inamovible)