El film de Antoine Fuqua es una notable recreación de la guerra Norte-Sur en los EE.UU. del esclavismo.
Al comienzo de “Emancipación”, la primera película de Will Smith luego de su breve, pero notorio impasse que siguió al escándalo de la bofetada a Chris Rock en la entrega de los Oscar, un texto pone en situación al espectador explicando que, en 1863, el presidente Abraham Lincoln promulgó el final de la esclavitud, dando comienzo a la Guerra de Secesión entre la Unión y los Confederados, y dejando a cientos de miles de esclavos sureños en la disyuntiva de esperar a que llegue el ejército y los libere o huir siguiendo el sonido de los cañonazos del Norte, con el primer puesto importante de la milicia negra en Baton Rouge. También aclara que estamos ante una historia real, y a lo largo del film vemos que todo el guion surge del antes y después de una fotografía tristemente célebre, que en ese momento dio la vuelta al mundo, exhibiendo la crueldad de los esclavistas. Era la foto del llamado “Whiping Peter” (“Peter el flagelado”) que sentado de espaldas a la cámara mostraba las huellas de docenas de latigazos que venían marcando su piel desde hacía años.
Un Will Smith totalmente metido en personaje y caracterizado a la perfección, tanto en lo físico como en su extraño acento haitiano, encarna a Peter, un hombre que vive con su esposa e hijos, esclavos en una temible plantación de algodón, pero que un mal día es separado de los suyos y vendido por el patrón al ejército del Sur para trabajar construyendo trenes, lo cual, como se ve en algunas de las escenas más crudas e intensas de “Emancipación”, implicaba una muerte casi segura.
La Guerra entre Norte y Sur es uno de los temas más fascinantes en la historia de Hollywood, y más allá de que no hay tantas películas al respecto, dado lo complicado del asunto, las que existen son memorables -más allá de los grandes films reaccionarios y acordes a sus tiempos, como “El nacimiento de una Nación” o “Lo que el viento se llevó”; incluso en los tiempos que mostraban el conflicto sin incursionar demasiado en el tema racial, como en “The Horse Soldiers” de John Ford, con el dúo John Wayne y William Holden, o aun en el film de culto del argentino Hugo Fregonese, “The Raid”, con Van Heflin y Lee Marvin y el tema de los prisioneros de guerra que luego apareció en otra cult movie pero de Sam Peckinpah, “Major Dundee”, con Charlton Heston y Richard Harris. Para que aflore el conflicto racial hubo que esperar más, y un gran ejemplo que en parte es una influencia de este flamante film de Antoine Fuqua, es la excelente “Glory” de Edward Zwick (1989), sobre el primer regimiento afroamericano, protagonizada por Matthew Broderick y el joven Denzel Washington.
Pero en la historia real del esclavo Peter (que nunca supo decir su apellido) es que la tensa trama tiene la diferencia de mostrar el drama individual del esclavo fugitivo con el tono épico del cine bélico histórico, y justamente esta combinación, a la que también se le puede agregar una pizca de western, siempre fue uno de los puntos fuertes de las películas de la Guerra del Norte contra el Sur. Aquí todo está condimentado con inteligencia y audacia por Fuqua, un experto en suspenso y acción con cosas para decir como se ve en excelentes y taquilleros thrillers como “Día de entrenamiento” o la sólida remake de “Los siete magníficos”.
El director pensó esa historia verídica para un público contemporáneo, con el énfasis no sólo en la crueldad física que supone la esclavitud –en este sentido el cazador de negros fugitivos que interpreta Ben Foster es un personaje clave y revelador- sino en detalles sutiles, originales y aterradores, como la reacción de una adorable niña blanca al ver al protagonista tratando de escabullirse al cruzar el parque de una típica mansión sureña.
Entendiendo que todo surge de una fotografía de 1863, y que esa guerra fue la primera en la historia en ser fotografiada de modo intensivo, Fuqua hace un trabajo visual sumamente imaginativo con el apoyo del director de fotografía Robert Richardson (el de Tarantino, Scorsese y Oliver Stone, que ganó 3 Oscars en su rubro incluyendo clásicos como “JFK”). El film involucra al espectador en las imágenes que empiezan sepia pero van tomando tonos monocromáticos azules, verdes o rojo sangre, según las penurias por las que atraviesa el personaje de Will Smith, quien hace un trabajo que volver a darle el premio de la Academia.
“Emancipación” (“Emancipation”. EE.UU., 2022). Dir.: A. Fuqua. Int.: W. Smith, B. Foster, G. Owor (Apple TV).