La gente común repara en la tasa activa que le ofrece una entidad de intermediación financiera para determinar sí le están ofreciendo un préstamo caro o barato. Esta variable (la tasa) es importante, pero no es suficiente para determinar si un préstamo te está saliendo elevado o en realidad te ofrecen condiciones favorables. Lo que intento decirte es que con una tasa nominal “más elevada” un préstamo podría ser más barato que otro de menor tasa.
Recuerdo que mi papá una vez me contó sobre una experiencia que tuvo en una ocasión en la que necesitaba un préstamo personal por un monto de RD$250,000.00 para saldar varias deudas que lo estaban agobiando. Mi papá se presentó a un banco que estaba cerca de nuestra casa a averiguar las condiciones de préstamos con la intensión de tomar el dinero allí.
El banco le ofrecía ese monto de dinero por una tasa del 16% anual, lo cual, se veía muy bien; pero mi papá era un hombre que se mantenía muy bien informado, sobre todo en asuntos financieros, así que él sabía que aparte de la tasa activa, además, debía aclarar que costo tendrían los gastos legales y de cierre, así como también de seguro.
El oficial del banco le informo que por RD$250,000.00 le descontaría por gastos de cierre y legal la cantidad de RD$10,000.00 y que además le cobraría un 2% por el seguro de vida es decir que le estaría entregando solamente RD$235,000.00 y pagaría mensualmente por 36 meses una cuota de RD$8,789.21 más RD$138.88 de seguro es decir que su tasa activa real era equivalente al 22%. A mi padre, no es que no le pareció injusto, pero decidió no tomar el préstamo en ese momento e investigar en otros lugares.
Un día luego de aquella experiencia, en horas de almuerzo, estaba conversando con dos compañeros de trabajo sobre el préstamo, en el comedor de doña Catalina, cerca del trabajo, y la doña le escucho y los interrumpió. “con pedión uté”, dijo la doñita con su acento cibaeño. “no pude evitai ecuchalo, pero yo soy socia de la cooperativa y allí yo he cogío mucho préstamo. Mire yo cogí pa´ hace mi casa y pa´ ete´ negocio y no me arrepiento”, le contó la dueña de aquel lugar.
Mi papá recordó que su comadre María era socia de esa misma cooperativa y le había dicho que compraría su casa con la cooperativa, de modo que mi papá fue hasta donde ella para que le contara como le estaba yendo con la cooperativa.
María le dijo: “mire compadre yo tengo RD$150,000.00 pesos en mis aportaciones en la cooperativa, el año pasado cogí un millón de peso a una tasa de 20 % anual y pagando una cuota de 26 mil y pico, Ud. se la podrá encontrar cara, pero observe, en un año yo pague un total de RD$188,553, pero la cooperativa me devolvió por mis aportaciones RD7,500.00 y por los intereses pagados me retornó RD$ 56,559.9 para un rendimiento de mis aportaciones más intereses pagados de RD$64,059.9 es decir más de un 30% y en porcentaje el retorno fue de un 6.49%, es decir, que mi tasa real en la cooperativa es de 13.59%.”
También le argumento: “Y esto no es obligado que sea así porque si mejor le va a la cooperativa más dinero me retornan a mí siempre y cuando yo mantenga bien mis aportaciones y pague muchos intereses.”
Después de estas explicaciones papá solo dijo que era muy diferente tomar un préstamo en una cooperativa que en un banco y que el entraría esa misma semana a la cooperativa del sector para empezar a ahorra y tomar préstamos allá.
El costo real de un préstamo incluye la tasa de interés activa a la que se oferta el crédito, más los demás cargos y gastos asociados, tales como: gastos legales, seguro de vida, seguro de la propiedad para el caso de un préstamo hipotecario, gastos de cierre, entre otros.
La tasa de interés activa, es la tasa nominal anual que se cobra sobre el capital prestado por un año. Esta puede ser fija o variable, que cambia según las condiciones del mercado o las evaluaciones que pudiera realizar la entidad bancaria.
A la hora de contratar un préstamo es importante que tengas en cuenta todas estas variables.
Por: Pedro N. Guzmán