Existe a lo que yo le llamo «un mal común» y este consiste en «dejar para mañana lo que puedes hacer hoy». TODOS los seres humanos padecemos de este mal en algún área de nuestra vida, del mal que hablamos se llama LA PROCRASTINACIÓN.
¿Qué es la procrastinación?
La RAE (real academia española) la define como Diferir, aplazar.
Pero me gusta más esta definición: «La procrastinación (del latín procrastinare: pro, adelante, y crastinus, referente al futuro), postergación o posposición, es la acción o hábito de retrasar actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o agradables».

¿Por qué procrastinamos?
He buscado por un largo tiempo la razón específica por la cual los seres humanos procrastinamos, sin embargo, no he dado con una sola respuesta, en cambio, he encontrado varias teorías que explican la razón por la cual procrastinamos:
1) Los neurocientíficos afirman que todo es cuestión de los niveles de dopamina. Según ellos, apreciamos que el premio está tan lejano que no nos motivamos a enfrentar una actividad. En otras palabras, nuestro cerebro no encuentra la motivación adecuada para movilizar sus recursos.
2) Por otra parte, hay psicólogos que afirman que la procrastinación está estrechamente vinculada a las características de personalidad. De esta forma, estaríamos más o menos condenados de por vida a ser procrastinadores.
Existe también otra teoría que habla de los diferentes tipos de procrastinadores y de porque procrastinan:
Los tipos de procrastinación:
1) La procrastinación como estrategia para sentirse bien:
Este tipo de personas, cuando experimentan un sentimiento de displacer con la actividad que están realizando, dan un paso hacia atrás y escogen postergar la actividad.
2) Los procrastinadores indecisos:
Este tipo de personas procrastinan inconscientemente, ya que se toman tanto tiempo para decidirse a hacer la tarea o no que cuando se decide, el tiempo que tenia programado para esta tarea se ha agotado y opta por dejarlo para mañana.
3) Los procrastinadores por excitación:
Este tipo de personas afirman que «trabajan mejor bajo presión» y por ende, dejan todo para el final.
4) Los perfeccionistas:
Este tipo de procrastinadores se la pasa esperando el momento perfecto y tener todo lo necesario para iniciar.
¡BIEN! Ahora entendemos qué es la procrastinación, también descubrimos por qué procrastinamos, pero…
¿Cómo dejo de hacerlo?
Aquí te dejo una lista de 5 cosas que entiendo pueden ayudarte a eliminar este mal común, ten en cuenta que puedes encontrar muchas más herramientas para apoyarte a superar este mal habito en Internet, libros, etc.
1) Crea una rutina diaria: es probable que esto te suene aburrido, pero es un paso que considero muy importante, ya que al crear una rutina y seguirla vas creando disciplina en tu vida y terminaras haciendo las cosas que realmente quieres hacer de manera inconsciente y sin ningún pesar.
2)Divide el trabajo en tareas pequeñas y concretas: Un proyecto grande y complejo puede resultar abrumador. Al dividirlo en pequeñas tareas consigues ver claro el camino y la resistencia a enfrentarte a él disminuye.
3)Evita las distracciones: Cuantas más tentaciones tengas para hacer otra cosa en vez de lo que tienes que hacer, más fácil será procrastinar. Mantén el móvil, las notificaciones y el acceso a Internet desconectados cuando te dispongas a afrontar tareas complicadas.
4)Planea tu día: todas las mañanas o antes de acostarte planea tu día siguiente, esto te ayudará a iniciar tu día con un objetivo claro y enfocado en lo que quieres conseguir.
5)No seas tan duro contigo: Es un proceso y de la noche a la mañana no vas a dejar de procrastinar, toma tiempo y esfuerzo.
¡Espero que esta información te haya servido de algo y que desde ya comiences a trabajar!